En esto del posicionamiento en buscadores hay de todo.
Tenemos gente que posiciona páginas web en sus ratos libres, auténticos profesionales del SEO que te pretenden cobrarte por atender tu consulta (que pongan un teléfono de tarificación especial, si es eso lo que quieren)… y luego estamos el resto de los mortales, que ofrecemos servicios para que nuestros clientes ganen en visibilidad, y que estamos todos los días pegándonos contra nuestro odiado buscador llamado google.
Entre estas 3 modalidades hay opciones intermedias, como no, pero lo que me llama la atención son esos consejos que las empresas que ofrecen posicionamiento web reparten alegremente, como el que riega un jardín sin saber lo que es la fotosíntesis.
Entre mis consejos sobre SEO favoritos están estos:
- No escribas pensando en el google; Que bien podría ser algo así como “di lo que te venga en gana aunque la gente (o el buscador) no te comprenda, no tenga claro de que va tu párrafo, ni a dónde quieres llegar”
- Se natural al realizar tu SEO; Esto es más que confuso, porque el SEO no se hace naturalmente ya que, hasta dónde yo se, si quieres mejorar el ranking de tu página web no sirve de nada escribir y dejarlo crecer, salvo que dispongas de una comunidad a tus espaldas que comparta tus contenidos y participe en tu web, referencie tus páginas web… y esos procesos de manera natural llevan mucho, mucho, mucho tiempo, salvo que seas alguien famoso en tu nicho porque te ha visitado y conocido mucha gente por estar bien posicionado (maldita pescadilla que se muerde la cola).
- No hagas SEO, haz Social Media; O sea, que generes contenido de calidad, enfocado a un tema (‘sin dispersarte’), lo publiques y distribuyas para que la gente lo valore (porque una entrada en twitter dura menos que un caramelo a la puerta de un cole), que los internautas lo compartan y te proporcionen enlaces y señales sociales, lo comenten y participen de ese contenido, etc… Y, ¿eso no es hacer SEO?.